Bautista Baila a su Ritmo

Bautista apenas podía respirar cuando nació. Tampoco podía comer: cuando su madre, Soledad, trató de amamantarlo, la leche le salía por la nariz y entraba en sus pulmones, ahogándolo. Si ella y su esposo, Luis, no hubieran encontrado a la Fundación Rioja a tiempo, el socio de Smile Train en su localidad, su bebé recién nacido podría haber sido otro de los tantos bebés que mueren cada año por complicaciones prevenibles relacionadas con las fisuras labio palatinas.

Marcando el paso, el equipo de la Fundación Rioja le enseñó a su madre las habilidades especiales necesarias para que su bebé pudiera comer y crecer. Una vez que Bautista estuvo lo suficientemente sano, le realizaron su primera cirugía de fisura labio palatina, la cual fue posible gracias a los generosos donadores de Smile Train de todo el mundo.

Esta le salvó la vida, pero no fue suficiente. No podía ser suficiente. El paladar de Bautista seguía abierto, lo que significaba que todavía necesitaba ayuda para alimentarse. Sus dientes estaban gravemente desalineados, y cada palabra nueva que aprendía a decir con los dientes desalineados y el paladar hendido amenazaba con hacer que su habla fuera mucho más difícil de entender por el resto de su vida.

Con este problema, el equipo de la Fundación Rioja también lo apoyó. Debido a que Smile Train apoya a los expertos locales en fisuras labio palatinas para que brinden la atención especializada que los niños necesitan, cuando la necesitan, Bautista se sometió a una segunda cirugía de fisura labio palatina para reparar su paladar tan pronto como tuvo la edad suficiente para ello. Los años siguientes trajeron ortodoncia y terapia del lenguaje personalizadas para sus necesidades únicas.

Sin embargo, se seguía sintiendo solo en la escuela. Cada vez que abría la boca, le recordaban lo diferente que era. Murmuraba cuando hablaba y tenía problemas para socializar.

Bautista siempre fue atlético y le gustaba la música, por lo que sus padres pensaron que tal vez unas clases de baile lo ayudarían a encontrar amigos y aumentar su confianza en sí mismo.

Hoy, desde la academia de baile hasta las calles, los movimientos de Bautista son ligeros como una pluma, pero llenos de energía. Junto con su diverso grupo de compañeros y compañeras, ha encontrado su sonrisa moviendo el cuerpo.

"Para mí, la academia de baile es como mi segunda familia, porque la maestra y mis amigos me han apoyado en algunas cosas que no podía hacer bien", dice. "Cuando estoy triste, bailo y me olvido de los problemas que tengo".

Cuando sea grande, quiere ser jugador de fútbol profesional porque su familia, maestros, amigos y equipo de especialistas en fisuras labio palatinas lo motivaron a levantarse y vivir en el cuerpo en el que nació. Él está decidido a brindar esa misma inspiración a otros.

"No me rendiré".

ACTUALIZACIÓN: Desde que se hizo este video, Bautista firmó con las Divisiones interiores de Boca Juniors en Buenos Aires. ¡El club que ha entrenado a más futbolistas profesionales que ningún otro en el mundo! Es un programa exigente con una competencia fuerte, pero la implacable ética de trabajo, el impulso y el optimismo que Bautista ha adquirido durante su larga travesía con la fisura labio palatina, además de su talento innato, lo han impulsado al éxito.