Presentes para ayudar
En una zona rural de Colombia, Rosa y su esposo vivían y trabajaban en una finca, cuidando a las vacas del hacendado.
Su vida dio un vuelco cuando nació su primer hijo, Óscar, ya que no supieron, hasta ese momento, que tenía labio y paladar hendido. La familia se movilizó en seguida, y encontró una organización de campañas quirúrgicas donde Óscar recibió su primera cirugía gratuita. Sin embargo, cuando se dieron cuenta que la calidad de la cirugía no era lo que habían prometido y Óscar comenzó a presentar complicaciones, el grupo de médicos ya se había ido, y ya no había a quién acudir.
Afortunadamente, poco después Rosa encontró a FISULAB, un programa asociado a Smile Train en Bogotá que atiende a pacientes con fisuras los 356 días del año en su propia comunidad. Óscar finalmente pudo recibir el tratamiento integral que necesitaba. Rosa estaba feliz con los resultados. Comenta que “Óscar nunca volvió a tener ningún problema”.
La familia tuvo un segundo hijo, Adrián, que nació sin fisura. Pero cuando su tercer hijo, Neitan, nació con labio y paladar hendido, de nuevo sintieron la angustia que habían sentido antes. Neitan empezó a enfrentar algunos problemas que no había tenido su primer hijo: “Cada vez que Neitan se alimentaba, se atragantaba o vomitaba. El hospital local me hacía alimentarlo con jeringa, muy poca cantidad a la vez, pero no era suficiente; siempre estaba llorando", nos cuenta Rosa.
Como ella sabía que FISULAB contaba con expertos en fisuras de diferentes disciplinas y que estaban disponibles todo el año, llevó a Neitan a consulta, para que le ayudaran con su problema de alimentación. "Cuando fui a FISULAB, el Dr. Prada me enseñó una técnica para alimentarlo con biberón. Me dijo que necesitaba darle de comer todo lo que pudiera porque estaba muy desnutrido [debido al método de la jeringa]. Neitan mejoró, ¡fue un gran alivio!", dijo Rosa.
Cuando Neitan tenía tres meses, le hicieron su cirugía de labio con la ayuda de Smile Train en FISULAB. Durante sus años de tratamiento recibió 4 cirugías financiadas por Smile Train y todo su tratamiento completo de ortodoncia.
“Las cirugías fueron difíciles para él y para nosotros, pero sabíamos que todas formaban parte del tratamiento y que Neitan mejoraría cada vez más. Fueron tiempos difíciles, pero hoy estoy muy contenta y agradecida con Smile Train y FISULAB ", dijo Rosa.
FISULAB, con el apoyo de Smile Train, puede también ofrecerle a Neitan sesiones de terapias de lenguaje una vez al mes. Como Bogotá les queda a varias horas de camino, el día de su consulta abordan un autobús a las 2:00 a.m. para llegar a tiempo a sus consultas. A pesar de las dificultades, Rosa se asegura siempre de que Neitan asista sin falta a todas sus sesiones, y Smile Train les apoya también con los gastos del traslado, para que no pierdan nunca una cita.
El hermano de Neitan, Adrián, nos cuenta que su hermanito ha mejorado mucho su habla en los últimos años, y que la terapia le ha ayudado a tener más confianza para hablar. "Ahora le entiendo mucho mejor. Somos mejores amigos, vamos y regresamos juntos de la escuela, y jugamos fútbol siempre que podemos."
Neitan está en quinto grado y cuenta que le gusta mucho estudiar, su materia favorita es Español. Le gusta ayudar con los animales de la granja y llevarle agua a las vacas.
Óscar trabaja en un invernadero para apoyar económicamente a su familia. Adrián y Neitan le ayudan a Rosa a barrer el piso, lavar los platos y a cocinar en la estufa de leña.
A Neitan le gusta mucho ir a FISULAB a sus consultas de terapia del lenguaje, aunque tenga que levantarse tan temprano. "Poder hablar mejor me ayuda a integrarme y aprender en la escuela", dijo.
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